lunes, 19 de enero de 2009

Dedicado

2/01/2009

Dedicado al único que ha sido capaz de soportarme y entenderme sin la necesidad de hablar el mismo idioma que yo. Algún día nos veremos en el camino. A más ver.

lunes, 12 de enero de 2009

I don´t want to set the world on fire..

Con cierta melancolía he empezado este nuevo año; después de incontables momentos en los que la ocasión proporciona cierta ornamentación de flecos, rojos intensos, borlas de colores, luces de variopintos tonos, mensajes de cortesía, en los que en la mayoría se puede ver a un señor pequeñito y orondo con un gran traje rojo. Todo año tras año es exactamente igual y totalmente diferente al mismo tiempo. La estética "Pin-up" solo queda relegada a objetos de decoración y ambientes selectos. Mientras que en el subconsciente permanece la memoria de lo que eramos y como era todo con 15 años menos, la falsa capa de la realidad nos quiere hacer permanecer aquí; dónde todo es lo último de lo último y dónde todo parece que nos empuje en vez de acompañarnos en la evolución. Todo está hecho para que nadie tenga que decidir, dónde todo es cómodo y encima de cómodo mantiene valores estéticos, así que, con un poco de suerte podrás decorar tu salón con aquella tostadora que viste en el escaparate, porque quedará bien encima de aquel mueble caoba, dado que la tostadora romperá con los colores por tener ese tono plateado que buscabas hace tiempo. Tristemente todo se valora iconicamente sin previo pre-análisis. Normalmente la gente empieza a pensar en cosas que quizá tal vez utilizaría cuándo diariamente se encuentra con ciertas carencias. Eso era antes. Ahora eso no es necesario. Puedes comprar cosas que jamás utilizarás, y es más: podrás comprar la nueva versión de aquello que compraste para no utilizarlo nunca, y sustituir el antiguo por el nuevo en tu estantería. No lo utilizarás, pero no te preocupes, ya lo tienes. Lo malo es que te aburrirás de él al verlo por segunda vez al pasar por el salón. Entonces piensas: "¿Debería haberlo comprado?". Oh, vaya. Si te ha ocurrido esto alguna vez, enhorabuena. Ésto quiere decir que alguna vez tuviste un pensamiento claramente no-consumista. Si se te pasó al momento siguiente, lo olvidaste y seguiste comprando en ocasiones posteriores sin volver a sentir lo mismo, quiere decir que tampoco te preocupó demasiado y que prácticas las tradiciones consumistas como ésta sociedad manda religiosamente todos los domingos. Si alguna te has sentido engañado por ti mismo porque no puedes remediar tu increíble ansia de adquirir nuevos artículos por un "módico precio" obstinadamente irónico por sutilezas del mercado, no te culpes directamente amig@... esto quiere decir que piensan por ti, saben lo que necesitas y de que careces, ofreciéndotelo en grandes tiendas y almacenes, con una inmensa habilidad para hacerte creer que necesitas ese objeto fervientemente.
Si por el contrario eres una persona que no necesita elementos ornamentales en su mesita-escritorio, si nunca necesitaste posters en tu habitación que le dieran "una personalidad" , o nunca llevaste chapitas de frases conocidas en la chaqueta vaquera, ni necesitaste comprarte aquella camiseta que te gustaba, porque pensabas que te aceptarían los demás por llevarla....enhorabuena dos veces. Inevitablemente consumes pero con una moderación por encima de los demás. Otra cosa es tu nivel económico, pero no te tira ese impulso de comprar cosas innecesarias. Sabes que si necesitas algo lo comprarás, pero solo cuando no tengas más remedio o te obliguen. Realmente prefieres tener pocas cosas a tener muchas y tener que guardarlas todas en cajas por si algún día piensas mudarte. Las cosas para ti además de un valor tienen una función, cosa que para el resto de mortales consumistas no parece conocer. Crees en la movilidad en el trabajo y el esfuerzo y no en la estética en la apariencia y el tener. Las dos caras opuestas de la propiedad.